“El poder siempre envició y destruyó más que las drogas”.
Augusto Cury,
El sentido de la vida
Siguiendo los pasos:
- Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en LinkedIn (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Pinterest (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en WhatsApp (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Tumblr (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para enviar un enlace por correo electrónico a un amigo (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para imprimir (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Reddit (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Pocket (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Telegram (Se abre en una ventana nueva)
“El poder siempre envició y destruyó más que las drogas”.
“Todos nosotros venimos a este mundo como pequeños manojos de necesidades emocionales, de las cuales podemos identificar tres: seguridad y supervivencia, afecto y estima, poder y control”.
“El poder te quiere comprar, te quiere corromper, pero tú no ves esos hilos hasta que ya te has enredado en ellos. La madeja del poder es muy sabia”.
“El falso yo busca fama, poder, riqueza y prestigio. El inconsciente es muy peligroso mientras que la luz divina del Espíritu Santo no penetra en su profundidad y revela su dinámica”.
«Todos venimos a este mundo con tres necesidades biológicas esenciales: seguridad y supervivencia, poder y control, afecto y estima».
«Los que tienen dinero y poder saben algo que tú y yo desconocemos y que hasta no nos atreveríamos a creer si alguien nos lo dijera. El dinero y el poder no satisfacen ese hambre indefinible del alma. Hasta los ricos y poderosos anhelan algo más».
“La omnipotencia es un atributo escatológico de Dios: se hará presente al final. Aunque en Jesús se nos revela que ya protológicamente, desde la eternidad, Dios es el Señor de todo, pero su señorío no se realiza en abstracto (potencia Dei absoluta), sino en la historia concreta del mundo, que implica la lucha con la nada”.
“A veces en nuestra vida tenemos por virtudes cosas que no lo son a los ojos de Jesús, y trabajamos por ellas. Estamos sujetos a las tentaciones del mundo, ante todo a la del poder, en segundo lugar a la del dinero y en tercer lugar a la de la carne”.
“Nada más peligroso que sentirse superior, te quedas solo como un ombligo”.
“El mundo de los hombres es un inmenso campo de lucha por la riqueza y el poder, y demasiados sufrimientos y atrocidades les ocultan el rostro de Dios”.
«El hombre-masa es el hombre cuya vida carece de proyectos y va a la deriva. Por eso no construye nada, aunque sus posibilidades, sus poderes, sean enormes».
“Los mansos —aquellos que permanecen libres de la adicción al poder mundano— pueden convertirse en un canal apto para transmitir el verdadero poder divino al mundo”.
«Cuando el hombre piensa sólo en sí mismo, en sus propios intereses y se pone en el centro, cuando se deja fascinar por los ídolos del dominio y del poder, cuando se pone en el lugar de Dios, entonces altera todas las relaciones, arruina todo; y abre la puerta a la violencia, a la indiferencia, al enfrentamiento».
UNA DOSIS DIARIA 