«No hay límites para nuestras ambiciones y tentaciones, y en consecuencia para que crezca el ego es preciso eliminar toda restricción… Se me dijo: «Invéntate, concibe tu propia vida, acomódala como te plazca, no solo minuto a minuto sino también desde el comienzo hasta el final». Pero ¿puedo hacer eso?».
Slawomir Meozek,
Letra pequeña
“En el tiempo de las tentaciones es necesario no abandonar la celda, por más valederos que sean los pretextos que se nos ocurran. Por contrario, hay que permanecer sentado en el interior de la celda, ser perseverante y recibir con coraje a los asaltantes, a todos, pero en especial al demonio de la acedia que como es el más pesado de todos, prueba al alma en grado sumo y la purifica al máximo. Porque huir de tales luchas y evitarlas torna inhábil, cobarde, traidor y miedoso al espíritu”.
Evagrio Póntico,
Tratado práctico
“A veces en nuestra vida tenemos por virtudes cosas que no lo son a los ojos de Jesús, y trabajamos por ellas. Estamos sujetos a las tentaciones del mundo, ante todo a la del poder, en segundo lugar a la del dinero y en tercer lugar a la de la carne”.
Francisco Nguyen Van Thuan,
El gozo de la esperanza
“Tienes todo lo que necesitas porque… en la vida no se necesita mucho. Adquirimos cantidad de cosas innecesarias, ya sea por miedo, tentación o costumbre…”
Caroline Stossinger,
El mundo de Alice
“En la hora de la prueba, en la tentación o en la tristeza, no son los libros los que pueden venir a ayudarnos, sino simplemente la Pasión del Señor Jesucristo”.
Éloi Leclerc,
Sabiduría de un pobre
“Así como los soldados en el combate se fortifican y aprenden el arte de la guerra, así nosotros, enfrentándonos con las tentaciones es como se van fortificando nuestras virtudes, hacen que arraiguen en nuestras almas y nos fortifican para la lucha.”
Luis María Martínez,
Espiritualidad de la Cruz
“A veces en nuestra vida tenemos por virtudes cosas que no lo son a los ojos de Jesús, y trabajamos por ellas. Estamos sujetos a las tentaciones del mundo, ante todo a la del poder, en segundo lugar a la del dinero y en tercer lugar a la de la carne”.
Francisco Nguyen Van Thuan,
El gozo de la esperanza
“El camino hacia Dios encuentra, en la situación humana actual, una psicología «rota»; unas tendencias desordenadas que, a veces, confunden la verdad con el error (además de las limitaciones de la ignorancia) e identifican el bien (o la gloria de Dios) con el propio egoísmo (siete «vicios capitales»). En el mismo deseo de verdad y de bien se introducen, pues, limitaciones aberrantes: orgullo por lo que uno sabe (o piensa saber), abuso de cosas buenas sin compartir con los hermanos, miedo de perder un bien o de no poder conseguirlo, desánimo, agresividad… Hay que ordenar la vida humana según el amor”.
Juan Esquerda Bifet,
Caminar en el amor
“La tentación nos obliga a la lucha. Sin lucha no hay victoria”.
Anselm Grün,
La sabiduría de los padres del desierto
UNA DOSIS DIARIA 